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Semillas de maíz y trigo del mundo se conservan en el banco de genes CIMMYT en México

La Global Seed Vault en Noruega, también guarda ejemplares de respaldo de semillas.

Los bancos de genes de semillas preservan la biodiversidad y la seguridad alimentaria del futuro.

Las semillas de maíz y trigo de todo el mundo que se conservan en el banco de genes International Maize and Wheat Improvement Center (CIMMYT), se utilizan para llevar nuevas variedades a los agricultores y se respaldan en la bóveda global de semillas Svalbard Global Seed Vault (GSV).

El CIMMYT desarrolla líneas mejoradas de maíz y trigo, con resistencia a estreses bióticos y abióticos de importancia mundial y con una calidad nutricional y de procesamiento mejorada. Sus bancos de germoplasma contienen las colecciones más grandes y diversas de maíz y trigo del mundo. Conserva 28.000 muestras de semillas de maíz y 150.000 de trigo en su banco genético en México.

La semilla mejorada y conservada está disponible para cualquier institución de investigación en todo el mundo, y se distribuye cumpliendo los términos y condiciones del Standard Material Transfer Agreement. El CIMMYT recopila datos sobre el rendimiento de las líneas distribuidas para seguir mejorando y comparte las conclusiones con la comunidad internacional de investigación y mejoramiento cuando están disponibles.

La GSV, ubicada en Svalbard, Noruega, se inauguró en 2008. Desde entonces, el CIMMYT ha depositado allí 170.000 muestras de maíz y trigo. La GSV se encuentra en lo profundo de una montaña en una isla remota en el archipiélago de Svalbard, a medio camino entre la parte continental de Noruega y el Polo Norte.

El objetivo de los bancos de genes es preservar la semilla y su biodiversidad. El cambio climático está afectando la supervivencia de las especies. Para neutralizar sus efectos, los recursos genéticos deben ser preservados en bancos de genes. La agricultura del futuro podrá así usar variedades más tolerantes acondiciones climáticas adversas, de mayor rendimiento y que requieran menos insumos.

Según estimaciones internas del CIMMYT, aproximadamente el 30% del maíz y más del 50% del trigo cultivado en todo el mundo se pueden rastrear hasta el germoplasma del CIMMYT.